
12 Nov ¿Cómo cuidar la piel después de los 30?
A partir de los 30 años y hasta los 40, la piel se encuentra en pleno inicio del proceso de regresión. La deshidratación cutánea, la oxidación provocada por el medioambiente, los malos hábitos o el propio envejecimiento natural son las principales causas de elastosis cutánea, de mostrar una piel apagada y de la aparición de las primeras arrugas en el rostro. Y, desafortunadamente, la primera persona que las percibe eres tú misma. Cuando llegamos a una cierta edad, la piel empieza a sucumbirse a las consecuencias del paso del tiempo, pierde fuerza ante el poder del envejecimiento. Sin embargo, para retrasar, reducir o incluso eliminar unos indeseables resultados, debemos cuidar nuestra piel. Pero, ¿cómo lo hago? Desde Dr. Junco, Cirugía Plástica y Estética te acercamos algunos consejos.
En primer lugar, el paso inicial para cuidar la piel después de los 30 es establecer una rutina de higiene correcta. Debemos liberarnos de la contaminación diaria, del maquillaje, del polvo, etc., que impiden el paso de principios activos y oxigeno y el correcto intercambio de nutrientes a nivel más superficial. La limpieza de la piel concebida como un hábito es una de las medidas principales que la mujer debe tomar. Y no sólo a partir de los 30, sino que debería hacerlo desde la juventud. El paso del tiempo y la degradación de la piel no se paran, por lo que avanzan en cualquiera de nuestras etapas vitales.
En segundo lugar, podemos acudir a los milagros de la medicina estética. A través de tratamientos no invasivos, podemos combatir el envejecimiento de forma intermitente y, si repetimos las sesiones, de forma casi permanente. Para conseguir cuidar correctamente la piel después de los 30, en Dr. Junco, Cirugía Plástica y Estética disponemos de dos recomendaciones estrella:
- La Mesoterapia facial: también conocida como tratamiento con vitaminas, consiste en la infiltración de diferentes sustancias naturales en combinación con vitaminas para mejorar la textura y el tono de la piel. Es, principalmente, un cóctel vitamínico con efectos antiedad, que ayuda a la piel a recuperar su aspecto inicial. Gracias a los componentes de la mesoterapia facial, se consigue estimular el propio metabolismo y se logra que éste corrija las consecuencias de la edad de manera natural.
- El ácido hialurónico: las inyecciones de ácido hialurónico, una sustancia que se encuentra de forma natural en nuestro organismo, nos devuelven la firmeza y la tersura faciales propias de la juventud. Lo que principalmente logramos con este tratamiento es rellenar las arrugas para conseguir una piel y una apariencia más fresca.
Los tratamientos de medicina estética se han diseñado para actuar como complemento de la higiene y el cuidado de la piel. La verdad, a lo largo de los años se han concebido como una vía de cuidado en sí misma. La piel sufre el paso del tiempo, pero existen distintos métodos que lo pueden evitar.